Por: Aelia
DESNUDEZ REFLEXIVAUn hombre que pasea desnudo completamente frente al Parque de la Ciutadella en Barcelona, bajo el sol humeante del buen clima catalán, nos mira atónitos, a todos nosotros, plebeyos monárquicos de la investidura de la moda textil.
Victimas de nuestra propia desnudez … tapada, nosotros también observamos sin palabras aquel espectáculo de día festivo. Los ancianos comentan, los jóvenes ríen un poco ruborizados y el hombre al desnudo se aleja cordialmente junto a su carro de la compra, en rojo y negro, el carro lo va llevando…
El momento es preciso y en el instante de colapso intento captar la imagen de aquel hombre y las caras que son miradas y miran, pero… ¿que momento es válido y que situación? ¿En que momento no se vulneran los derechos de los demás? ¿En que momento no invadimos, los comunicadores, la privacidad, la alegría o el dolor ajeno, solo por el ímpetu de informar?
La desnudez de ese hombre no solo me llevó a reflexionar en extenso acerca de los modelos de sociedad y" habitué " impuestos por la industria y por supuesto la creación de las necesidades ficticias a ficticios demandantes, que poco a poco se vuelven reales... sino en el momento en que un click o una palabra hace intromicion y espejo en una vida y en una situación.
Tengo el objetivo de comunicar con profesionalidad la noticia y eso prima ante todo…o bueno casi todo. Pro mas de una vez imagino como debe sentirse estar en la piel de aquellos que fotografían el horror o son observadores en una guerra, comen y beben de los mismos problemas de una zona roja y más de una vez están cercanos a la muerte o frente a ella con una cámara, teniendo que hacer justicia a su profesión, dejando de lado su humanidad.
CREO QUE ESTA REFLEXION DEBERIA HACER VALORAR LA PROFESION DE MUCHOS PERIODISTAS Y TRABAJADORES DE LA COMUNICACIÓN QUE DAN SU VIDA Y SU IDEOLOGIA AL ARTE Y DEBER DE COMUNICAR.
MÁS DE UNA VEZ SER NO ES “LA” DECISIÓN, SINO MÁS BIÉN UNA VULGARIZACIÓN DEL MIEDO A LOS DEMÁSRefugiados en los gritos de un hombre completamente de negro que gritaba euforizado el eclipse de su amor, el mundo parecía no ser mas que un campo de juego para algunos. Envidie como mas de una vez esa soberbia de Mao… esas ganas de llevar las cosas a cabo y quise ser como aquel… como aquella estrella que aparece en todos lados y que nadie ve… por que al fin y al cabo ese es siempre el secreto del artista: mostrar una forma de sombra, en elogio de realidad de aquello que se oculta ante las vista de todos.
Es raro cuando uno ansia la soledad y no es conciente de que a veces es lo único que tiene… otras veces tiene mas suerte como algunos…como yo… y no esta verdaderamente solo. La soledad es un fenómeno aparente y más de una vez atraído por nuestro inconsciente. No puedo renegar de este factor, de esta “H” que me indigna. Después claro, el problema es eso el después… ¿que sacrificio conlleva estar solo? ¿Es la guerra una variación del yo contra el yo? ¿Del éxito personal versus los logros a nivel apreciativo del entorno de las personas que mas de una vez se desviven por hacerte ver que no todo esta tan mal? ¿Que no hay tanto vacío después de todo? ¿Que más de uno te daría una segunda oportunidad?
El papel te entiende, el lápiz te ayuda a decir de una vez por todas lo que mordías a regadientes en aquella confesión ensoñada, el sonido hace suave el golpe del fracaso y te hace tener nuevas razones para buscar un nuevo ser, un nuevo complemento de tu alter ego disminuido tal vez… pero un ente oscilante capaz de interceder en el transcurso de los sucesos de una vida, ya no es un elemento externo, involuntario… pasa a ser una sección de uno mismo… uno mismo es el que se secciona y se entrega a esto que aun no logro aprender a vivir en plenitud sin desperdiciar centellazas de cuerpos y experiencias.
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